Ad

“Inmunidad”

  • Comunicación, colaboración y cooperación
  • Cuidar la ejecución y recepción del pase (compartir la “inmunidad”)
  • Reforzar la asociación de pase y movimiento sin balón
  • Estimular y mejorar la capacidad de engañar a un jugador rival
  • Fintas corporales, velocidad, aceleración, frenar, cambios de dirección y de ritmo...
  • Tarea de activación divertida y competitiva
Ad

Un juego sumamente tradicional como el “pilla-pilla” puede ser un excelente punto de partida para una gran variedad de propuestas que, con ligeras adaptaciones, funcionan especialmente bien como tareas de activación al inicio de cualquier sesión de entrenamiento. Además, gracias a su versatilidad y flexibilidad, podemos introducir diversas reglas condicionantes y/o variantes que orientan el juego hacia diferentes objetivos motrices, cognitivos, técnico-tácticos o socioafectivos, en función de las necesidades del grupo y del enfoque del entrenamiento.

Esta propuesta mantiene intacto el carácter competitivo presente en todas las variantes del “pilla-pilla”, pero favorece de forma natural la comunicación y la cooperación entre todos los participantes.

Además de decidir cuántos jugadores intentarán pillar al resto de participantes, debemos introducir varios balones extra que otorguen “inmunidad” a los jugadores que los tengan en su posesión.

Ad

Quienes controlan los balones adicionales no pueden ser atrapados por sus rivales y, además, pueden proteger a cualquier compañero en apuros pasándole el balón. Sin embargo, al hacerlo pierden su “inmunidad”.

Cuando un jugador pilla a otro, se intercambian roles y la dinámica del ejercicio continúa hasta que el entrenador lo decida.

Ad