Este ejercicio, clásico donde los haya, es sumamente eficaz para trabajar volumen de tiro desde posiciones exteriores, interiores y/o adaptadas a cada grupo de jugadores (lanzamientos cerca de la canasta, desde el bote, desde más allá de la línea de tres puntos, etc.).
Su funcionamiento es muy sencillo:
🔥 Cada jugador realiza su correspondiente lanzamiento a canasta.
➡️ Después, captura su propio rebote y entrega el balón siempre al mismo compañero.
🔁 Por último, se desplaza para ocupar una nueva posición, recibir el balón y efectuar otro tiro exterior.
⏱️ Aconsejamos realizar series de tiro de aproximadamente uno o dos minutos de duración.
A partir de este planteamiento inicial, que puede extenderse a grupos de cuatro jugadores y tres balones, cada entrenador debe establecer unos objetivos de anotación concretos.
Podemos trabajar a modo de competición entre cuatro tríos (con doce jugadores), entre dos equipos, de manera individual dentro de cada trío, etc.
En función del grado de competición e intensidad que decidamos imponer, podemos transformar este ejercicio en una propuesta bastante exigente a nivel de acondicionamiento físico. En cambio, si eliminamos el aspecto competitivo, puede ser algo más relajado y facilitar la vuelta a la calma.
Como decíamos al principio, se trata de una propuesta muy útil, flexible y fácil de introducir en cualquier sesión de entrenamiento.
Variantes
- Incorporar lanzamientos tras finta de salida o de tiro.
- Añadir tiros desde el bote.
- Definir el tipo de pase (de pecho, picado, a una mano, sobre la cabeza…).
- Rango de tiro → Alejarse progresivamente de la canasta conforme todos los jugadores del trío anotan sin fallo.
- Competición “todos contra el reloj” (mínimo de tiros anotados en X tiempo):
- Tiro a media distancia = 2 puntos.
- Triple = 3 puntos.
- Penalizar varios fallos consecutivos (restar puntos).
- Grupos de cuatro jugadores (y tres balones).